Surf. La Fanta-sia.

150 piezas en impresión digital sobre papel y óleo sobre tela o madera.

Este proyecto se centra principalmente en dibujos en impresión digital sobre papel y obra en pintura sobre tela o madera. Utiliza una imaginería basada en la cultura del surf, los surfistas, el Beach Life y el Mediterráneo, retratando en muchas ocasiones espacios del Maresme. El proyecto plantea realizar asociaciones y al mismo tiempo descontextualizar sus elementos protagonistas. En muchas ocasiones el resultado final está próximo al collage.

“California ha sido una realidad tremendamente magnificada, llegándose a veces a la total fantasía. La lejana tierra de jauja, en la que nadie cumple más de veinticinco años, el colegio está prohibido y la Coca-Cola mana gratis de las fuentes públicas. Allí no encontrarás barreras y el sol se levantará todos los días para ti. Por la mañana surf, largos paseos más tarde y quizá una barbacoa al anochecer.Surf City, chicas, chicos, cines al aire libre y guateques en la playa. California Dreaming: esto es lo que Chuck Berry nos quería decir. Las Fantasías- Fanta Bebida de extractos- de California han sido siempre como las tiras cómicas de un tebeo, continuas imágenes de arena, mar y sol, todo dibujado muy sencillo, claro y luminoso. Cuando llegan las vacaciones de verano bajarían las chicas y los chicos a las playas, harían surf, harían una barbacoa para cenar y bailarían descalzos en la arena. También entonces se enamorarían, y así hasta que llegara el otoño y el instituto abriera sus puertas y todo comenzara de nuevo. Comenzaban los años sesenta y por aquella época el surf lo era todo, era el culto máximo de la Costa Oeste. Había sido el deporte de mar favorito desde después de la guerra. La gran devoción por el surf es comprensible: imagínate a ti mismo avanzando sobre enormes olas, todo el mundo te mira, las chicas asombradas y los chicos por supuesto, y tú simplemente con la ayuda de esa tablita bajo tus pies, te precipitas, te remontas, vuelas libre y nada puede detenerte. Te pasea y desliza por el agua, pero con tanta rapidez, tanto equilibrio… que pareces un dios en todo su esplendor. Al acabar, te pones la tabla bajo el brazo y andas por la playa con el cuerpo tan fresco y tan ágil, sin mirar a ningún lado, sin ni siquiera prestar atención. Te sientes el mejor. Te tiendes sobre la arena y sientes tus músculos relajados. Esta es la fantasía del surf. Es el deporte más exhibicionista y vanidoso que se ha inventado.
Los beachboys con su talento realizaban música surf sin realmente saber que estaban creando poesía pop”. Nik Cohn.